¿Es el dueño del gym o es la persona que entrena allí? Todos los escenarios posibles a tener en cuenta cada vez que aparece una lesión en el gimnasio.
Cuando una persona va al gimnasio a hacer ejercicio, es posible que no piense en la responsabilidad por lesiones hasta que sufra un accidente evitable.
Supongamos que un cliente está entrenando en un gimnasio, la mancuerna se rompe y cae sobre su pie. El resultado es que el cliente se lastima un hueso y se encuentra impedido de trabajar durante un tiempo. En este escenario, ¿quién debería hacerse cargo?
Cuando se habla de la responsabilidad de un cliente, un entrenador o un dueño de gimnasio frente a una lesión, es muy particular en cada país. Cada lugar tiene su normativa, sus leyes y criterios a seguir. Entonces es muy importante que, ya sea como alumno o empresario de un centro fitness, contactes primero con un abogado o con una compañía de seguros para asesorarte correctamente.
No obstante, siempre es bueno que estés informado. Por eso en el artículo de hoy, descubrirás todos los escenarios posibles a tener en cuenta cada vez que aparece una lesión en el gimnasio
Tabla de contenidos
Escenario 1: tipos de responsabilidades frente a lesiones
Dependiendo de las circunstancias, las siguientes personas podrían tener cierto grado de responsabilidad por los daños en caso de lesiones:
Usualmente, por ley, los gimnasios son responsables de mantener un entorno de entrenamiento razonablemente seguro. Deben limpiar el equipo del gimnasio con regularidad y mantener la propiedad de manera segura. Si el cliente tropieza con un piso mojado, sufre una enfermedad grave (como una infección por estafilococos debido a equipos insalubres) o sufre una lesión debido a un equipo con un mantenimiento inadecuado, el gimnasio puede asumir la responsabilidad.
Los fabricantes de equipos son responsables de diseñar equipos de gimnasio seguros, producir equipos que cumplan con los estándares de seguridad de la industria y advertir a los usuarios sobre los riesgos potenciales asociados con su uso. Si un fabricante entrega una máquina de ejercicios defectuosa o mal documentada, es posible que tenga un caso contra la empresa del equipo.
Otras personas también pueden ser responsables. Si alguien más lastima a otra persona intencionalmente o por descuido en el gimnasio, esa persona puede ser responsable de cualquier lesión que sufra la persona lesionada. Por ejemplo, algunos usuarios de peso libre son particularmente descuidados cuando empiezan a trabajar en una rutina. Si se balancean hacia atrás y golpean en la mandíbula a otra persona, o dejan caer un peso y golpea o rueda hacia otra persona, es posible que exista un caso contra ese individuo.
A menos que sepas que tu propio descuido contribuyó al incidente, considera hablar con un abogado de lesiones personales sobre cualquier lesión que sufras en un ambiente de gimnasio. El gimnasio en sí no es el único demandado potencial en un caso de lesiones personales y cualquier persona merece una compensación justa después de sufrir una lesión evitable en un ambiente de gimnasio.
Escenario 2: situaciones que agravan la lesión
Según la ley, los dueños de una propiedad que se utiliza con fines comerciales deben garantizar que se implementen todas las medidas de seguridad razonables para proteger a sus clientes. Para los propietarios de gimnasios, esto significa que deben asegurarse de que los clientes no corran peligro cuando entrenan en las instalaciones.
Algunas de las situaciones que pueden poner en peligro innecesario a un cliente en un gimnasio incluyen las siguientes:
Una persona no recibe atención médica inmediata después de una lesión.
Si tu te lesionas, por ejemplo, durante el entrenamiento, un empleado del gimnasio debe atenderte inmediatamente con equipo básico de primeros auxilios y de manera competente. No hacerlo puede poner a los propietarios del gimnasio en problemas legales, especialmente si tu condición empeora debido a su negligencia.
Una persona se lesiona debido a un equipo defectuoso o dañado. Un equipo con mal funcionamiento con pleno conocimiento de los dueños de gimnasio. En este caso, los propietarios o gerentes de gimnasios incurren en una doble responsabilidad. En primer lugar, por no asegurarse de que el equipo de entrenamiento esté en perfectas condiciones de funcionamiento con un mantenimiento regular. En segundo, porque tenían pleno conocimiento de esto y no hicieron nada al respecto.
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Escenario 3: responsabilidad como el dueño de gimnasio
En este escenario tú eres el dueño de gimnasio, por lo que esta información está dirigida a los dueños de gimnasio.
Un cliente está entrenando en tu gym. Cae de la barra y tiene una fisura en la columna. No puede trabajar, y habla contigo para ver que seguro tiene tu gimnasio para cubrir su lesión.
Inmediatamente, contactas a tu seguro de responsabilidad civil y tu aseguradora te hace las siguientes preguntas:
“¿Se ha roto la barra?… respondes NO
¿El material estaba mojado?… respondes NO
¿Ha caído una gotera y ha mojado el material?… vuelves a responder NO”
En este caso, no tienes un problema civil. ¿De quién es la responsabilidad entonces?
Tu mejor salvavidas
Siempre hay un responsable frente a un accidente o una lesión. Puede ser el entrenador o el propio gimnasio.
Tu verdadero problema comienza cuando el entrenador “manda” a una persona a colgarse de la barra, sin percatarse de que no está preparada para hacer ese tipo de ejercicio. Sin una adaptación previa.
Entonces, en esta situación, el seguro de responsabilidad civil puede iniciar una disputa contra el entrenador, y hacerlo responsable del accidente. Por eso, es recomendable que todos los entrenadores de tu gimnasio tengan un seguro de responsabilidad personal.
RETIENE ESTA IDEA: El seguro de responsabilidad personal es tu mejor salvavidas contra juicios, lesiones y accidentes en tu centro deportivo.
Prevenir antes que lamentar
Con el seguro de responsabilidad civil y el de responsabilidad personal, tu gimnasio está protegido contra juicios y lesiones. ¡Enhorabuena!
Ahora veamos como también puedes prevenirlos y evitar dolores de cabeza innecesarios.
En primer lugar, es muy importante que el entrenador de tu gimnasio tenga conocimientos de lo que está haciendo. Tiene que saber que puede estar trabajando con personas hipertensas, con cuadro de diabetes, o con hernias abdominales, umbilicales o de columna. Debe conocer todas esas enfermedades para poder adaptar el entrenamiento a cada persona de la forma más segura. Esta es la única manera de prevenir lesiones y accidentes.
Imagina que un cliente comienza a entrenar, recién operado del corazón, con prescripción médica, … Y el entrenador no tiene idea de lo que debe hacer. O una mujer embarazada de 3 meses que desea hacer ejercicio. El entrenador tiene que saber ciertas cosas. Por ejemplo, si esa mujer ha entrenado alguna vez. Si el médico ha permitido que realice actividad física, etc.
Un entrenador es un preparador físico, pero también de la salud. Dar clases va mucho más allá que contar repeticiones…
4 formas de mantenerte alejado de juicios y lesiones
En conclusión, los juicios y lesiones pueden prevenirse tomando algunos recaudos que harán de tu gimnasio un lugar seguro.
1- Contratando un seguro de responsabilidad civil
2- Contratando un seguro de responsabilidad personal
3- Cuidando y manteniendo todos los materiales de tu gimnasio.
4- Seleccionando entrenadores formados y conocedores de la actividad, que sepan cuidar de la salud de sus clientes, y principalmente que manden hacer ejercicios dando más importancia a la seguridad que a la intensidad.
En CrossHero creemos que una buena administración de tu gym favorece el control y la protección, tanto de tu gimnasio, como también de los entrenadores y clientes.
Por eso, ofrecemos a todos nuestros centros asociados, los Términos y Condiciones de CrossHero. Un documento con todos los términos y condiciones que tu gimnasio necesita frente a posibles situaciones que pueden ocurrir, y que el cliente acepta al utilizar tus instalaciones y servicios.
