10 hacks para convertirte en profesora de yoga y viajar por el mundo

Enseñar yoga en un país extranjero te da la oportunidad de ver nuevos lugares, probar nuevas experiencias y ganar algo de plata en el camino. Así puedes tu también conseguirlo.

Mucha gente se pregunta como convertirse en profesora de yoga y viajar por el mundo, ¿es esto posible o es solo un sueño de adolescente?

 

Es más que posible. Las oportunidades para hacerlo abundan y muchas suelen suceder accidentalmente. Puede ser ocupando un puesto de reemplazo de última hora como profesora de yoga en un retiro de yoga de surf, o en una playa a pedido de un grupo de turistas.  Sin embargo, también puedes planificar convertirte en profesora de yoga itinerante o nómada, ¡y es 100% posible y emocionante!

 

Enseñar yoga en el extranjero tiene muchos beneficios:

 

Te da la oportunidad de ver nuevos lugares

Probar nuevos alimentos y aprender de otras culturas.

También es una excelente manera de conectarse con otros profesores y estudiantes de yoga en todo el mundo.

En muchos lugares, los costos de vida son mucho más baratos, por lo que es posible que puedas mantenerte como profesor de yoga nuevo y obtener una experiencia valiosa.

 

Si estás listo para empacar tu mochila y subirte a un avión con tu esterilla de yoga, toma nota de estos 10 hacks para encontrar un trabajo como profesora de yoga viajera.

Tabla de contenidos

#1 Encuentra un estudio de yoga que te guste y empieza desde allí

Cuando viajes, visita los estudios de yoga donde quieras que estés y encontrarás un lugar que resuena con tu corazón. Regresa a menudo, hazte amigo del personal y del maestro, y ofrécete a las subclases si necesitan a alguien para reemplazarlo. Dale tiempo, sé paciente y podrás encontrar el trabajo de tus sueños de yoga como profesor de yoga itinerante.

#2 Ver oportunidades de enseñanza de yoga en línea

Siempre revisa los grupos de Facebook en busca de nuevas oportunidades.

 

También puedes postularse en un retiro de yoga como voluntario o karma yogui. Sin embargo, no todos te darán la oportunidad de enseñar, así que si este es tu objetivo, asegúrate de tener la oportunidad antes de registrarte.

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#3 Crea tu CV de yoga

¡Este es uno de los mejores secretos para conseguir los mejores trabajos enseñando yoga en el extranjero! Y es lo único que asegurará que te destaques de la competencia. Incluso si aún no tienes mucha experiencia docente, un CV bien diseñado dará la impresión de que eres profesional, confiable y que te tomas tu trabajo en serio. Y para un empleador eso es tan importante como tu experiencia docente.

 

Esto es lo que debes poner en tu biografía de yoga:

 

  1. Tu nombre y datos de contacto
  2. Un breve texto sobre ti y su estilo de enseñanza.
  3. Información sobre tu educación en yoga: enumera todos los entrenamientos y talleres que has realizado. Si eso llenaría un libro, enfócate en los 10 más importantes.
  4. Tu experiencia docente: haz una lista de todos los lugares donde enseñaste yoga antes. Si nunca antes has enseñado yoga en un estudio de yoga, no te preocupes. ¿Qué hay de las clases privadas que les enseñaste a tus amigos? Escribe sobre eso. Escribe sobre tu pasión por el yoga y compártela, cómo no puedes esperar para enseñar más, cómo te encantó practicar la enseñanza en tu formación de profesores de yoga. Sé real y auténtico y tendrás tu oportunidad.
  5. Tu experiencia de vida: incluye lo que hiciste antes de enseñar yoga. No tienes que añadir información sobre tu vida laboral previa al yoga, sino los puntos principales. Ayudará a tu futuro empleador a hacerse una idea de quién eres, e incluso podría ayudar a tu solicitud. Por ejemplo, si tienes experiencia en marketing y el centro de yoga está buscando apoyo con sus actividades en las redes sociales, es posible que tengas más posibilidades de obtener ese puesto.
  6. Por último, agrega algunas buenas imágenes tuyas, un retrato y algunas tomas de yoga que muestren el nivel de tu práctica. Es recomendable conseguir un buen fotógrafo para que te ayude con eso.

#4 Define tu perfil como una marca

El mercado de la enseñanza de yoga está cada día más saturado, por lo que es importante definir tu perfil comercial como instructor de yoga y tener claro tu nicho.

 

Intenta definir lo que representas. ¿Clases fuertes de flujo de vinyasa? ¿Hatha yoga suave con un enfoque Iyengar? ¿Ashtanga tradicional? ¿Yin y yoga restaurativo? ¿Yoga para niños? Tal vez seas bilingüe y puedas enseñar en más de un idioma. Sea lo que sea, encuentra lo que hace que tu oferta sea única para diferenciarse del resto.

#5 Construye un sitio web

Consigue un sitio web lo antes posible, para que las personas puedan encontrarte en línea y aprender más sobre ti. También se verá más profesional cuando solicites trabajos como profesor de yoga itinerante.

 

Tu sitio web no tiene que ser increíblemente caro o elegante. Comienza con algo simple, un sitio en WordPress o una Landing Page que vaya directo al punto.

#6 Usa tu red de contactos

Conéctate con los propietarios de los estudios y los profesores de yoga que conozcas y con cualquier otra persona que pueda ayudarte a encontrar un trabajo de enseñanza local. El boca a boca es una de las mejores formas de guiarte hacia las oportunidades. Las redes sociales son excelentes para mantenerte en contacto y conectarte con otros profesores de yoga en un camino similar.

#7 Voluntariados para obtener práctica en yoga

Un entrenamiento de tres semanas no te convierte en profesor de yoga. Sólo la práctica lo hace. El voluntariado es una gran oportunidad para adquirir una valiosa experiencia y confianza en tus habilidades de enseñanza. Dar clases gratuitas de yoga comunitario en el extranjero es una gran oportunidad para mejorar habilidades. Dicho eso, luego de un cierto período razonable de voluntariado, es recomendable pedir un pago. Todos deben ganarse la vida y la formación de profesores de yoga es cara.

 

#8 Discute el pago y los requisitos antes de comenzar

A muchos profesores de yoga no les gusta hablar de dinero y contratos y es razonable. Pero es importante, así que no omitas este paso y aclara tu arreglo de trabajo de yoga.

 

Lo mejor es un contrato por escrito, pero si no lo obtienes (lo cual es bastante común), asegúrate de entender la estructura de pago (¿Cuánto te pagarán? ¿Por estudiante o por clase? ¿Un porcentaje?), ¿cuándo será pagado, y lo que se espera de ti. No olvides anotar los números de teléfono y los datos de contacto del estudio en caso de emergencia.

#9 Mantente al día sobre vistas e inmigración

Cuando esté buscando trabajo como profesor de yoga itinerante, no se te permitirá trabajar oficialmente en la mayoría de los países a los que viajas como turista. Y las visas de trabajo suelen ser caras y difíciles de conseguir.

 

Siempre haz tu investigación. ¿Tu empleador te ayudará con su visa o el riesgo recae únicamente sobre tus hombros? ¿Qué podría pasar cuando trabajas ilegalmente? Se consciente de tu situación y tal vez no anuncies tu nuevo trabajo con orgullo en las redes sociales cuando oficialmente no se te permite trabajar en ese país.

#10 No olvides tu autopráctica

Esta es la parte más importante de convertirse en profesora de yoga. Nunca olvides tu propia práctica, visita talleres y clases, estudia anatomía y filosofía del yoga. Mantente abierta e interesada. El yoga es un viaje interminable y todos somos principiantes.

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